El niño filósofo es una obra en la que Jordi Nomen nos ayuda a «hacer pensar» a los niños y las niñas para aumentar su capacidad reflexiva, crítica y creativa.
Los niños y las niñas están en un proceso de descubrir el mundo:
- Tienen una capacidad de asombro y de curiosidad que hace que nos pregunten –constantemente– sobre el por qué de las cosas más inauditas.
- En algunos casos, algo que ni siquiera nosotros nos habíamos puesto a pensar.
Sinopsis de El niño filósofo
Los niños tienen una extraordinaria capacidad de asombro y una curiosidad prácticamente ilimitada, dos cualidades que los convierten en pequeños grandes filósofos.
El niño filósofo es una herramienta clave, tanto en casa como en la escuela, para potenciar esta inteligencia filosófica que les permitirá desenvolverse como ciudadanos activos y comprometidos.
El libro está organizado en dos partes:
- La primera parte nos invita a considerar los beneficios que la educación filosófica puede conllevar en el desarrollo intelectual, personal y social de los niños.
- La segunda parte plantea doce grandes preguntas, legado de doce importantes pensadores de la tradición occidental, y propone ejercicios prácticos para que familias y educadores puedan abordarlas con los niños desde la crítica, el diálogo, el juego y la creatividad. (Arpa, 2018.)
Jordi Nomen, autor
Nacido en 1965 es profesor de Filosofía y Ciencias Sociales y jefe del departamento de Humanidades de la escuela Sadako de Barcelona –a la que puedes acceder desde aquí–; reconocida como uno de los centros educativos más influyentes e innovadores de España.
Es licenciado en Historia Contemporánea por la Universidad de Barcelona y tiene un posgrado de Ciudadanía Activa en la misma universidad y un máster en Filosofía por la universidad de Gerona. Ha sido galardonado con los premios EDU21 en 2009 y Arnau de Vilanova en 2011.
Nos argumenta Nomen que los niños y las niñas deben aprender Filosofía porque con ella:
- Despertarán su mirada crítica ante el mundo globalizado en el que vivimos.
- Aprenderán a pensar por sí mismos.
- Llegarán a ser ciudadanos activos en una sociedad que debe luchar por un mundo mejor.
- Descubrirán la alteridad y lucharán por el bien común.
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Reseña de El niño filósofo
La tesis fundamental del libro consiste en poner a disposición de familias y educadores algunas de las grandes preguntas que se han hecho en la historia de la Filosofía.
De esta forma influiremos en el desarrollo personal y social de niños y niñas con la finalidad de que se lleguen a convertirse en ciudadanos activos y comprometidos llegando a ser personas capaces de vivir en sociedad con el modo de vida que libremente elijan.
En el libro encontramos dos partes bien definidas. En la primera parte el autor nos habla de sus concepciones filosóficas y de cómo esta disciplina puede ser aprendida por los niños desde muy pequeños.
Dedicado a familias y educadores responde a las siguientes preguntas:
- ¿Quién fue Matthew Lipman?
- ¿Para qué les sirve la filosofía a los niños?
- ¿Con qué recursos puede hacer filosofía el niño filósofo?
- ¿Hay una inteligencia filosófica?
- ¿El diálogo filosófico es un arte?
- ¿Existe el pensamiento cuidadoso?
- ¿Imágenes que valoran pensamientos?
- Cierre provisional.
Se trata de hacer pensar a los niños y las niñas sobre las grandes verdades filosóficas para que, de esta manera, aprendan a opinar y que se les tenga en cuenta en las decisiones adultas; porque de nada serviría que tuvieran sus propias opiniones si después no se les da espacios ni tiempos para que las expongan.
En la segunda parte del libro se nos habla de grandes filósofos y sus tesis correspondientes que nos ayudarán a responder a las siguientes preguntas:
- Platón: ¿debemos actuar con la cabeza o con el corazón?
- Aristóteles: ¿cómo podemos decidir lo que está bien?
- Epicuro: ¿el placer debe ser el fin último de nuestros actos?
- Séneca: ¿debemos tener miedo a la muerte?
- Spinoza: ¿cómo se puede conseguir la alegría?
- Montaigne: ¿es importante tener buenos amigos?
- Rousseau: ¿para qué sirve la educación?
- Kant: ¿qué debemos hacer?
- Nietzsche: ¿hay que ser creativo para vivir?
- Wittgenstein: ¿hay que opinar sobre todo?
- Arendt: ¿qué es la maldad?
- Fromm: ¿es más importante tener o ser?
En principio, se nos da una información de las teorías del filósofo, después se nos cuenta una historia o un cuento relacionada con el tema, se pasa a pautas para el diálogo donde se nos dan una serie de preguntas que podemos hacer a los niños y las niñas para tratar de hacerlos reflexionar, a continuación se dan unas pautas de juego, unas pautas de arte y una propuesta plástica.
El libro es muy completo, de lectura amena porque va introduciendo anécdotas, historias…, puede ser un buen manual de trabajo para la escuela o para las familias.
Su lenguaje es asequible a pesar de que las teorías filosóficas a veces no son tan fáciles de explicar. Muy recomendable para los docentes y educadores preocupados por hacer de los niños y las niñas personas con una formación crítica que lleguen a formar una ciudadanía democrática, crítica, solidaria, reflexiva…
“Al niño filósofo que defiendo en este escrito, no lo imagino inmóvil y místico, sentado en una roca junto al mar, contemplando el universo -aunque no hay nada de malo en ello-; lo imagino como persona luchadora y rebelde, que reflexiona para saber qué escoger, pero se apasiona por cambiar lo que considera injusto y se presta a equivocarse para aprender a acertar. Como una persona crítica y creativa, cuidadosa e implicada en su realidad”.