Y, sí, los tiempos han cambiado,
el sentido común se ha vuelto raro
El mundo educativo se tiene que valorar previsible para todos porque, si no, siempre estamos en una crisis permanente, y los valores «se desvalorizan», porque se pierden los objetivos y los principios; por ejemplo: ¿Qué educamos? ¿Cómo educamos y para qué educamos?
A veces, creo que se necesita una «escuela para padres»; ya que la familia y la escuela son fuentes fundamentales de socialización de nuestros alumnos quienes quizás –muchos–, son nuestros hijos también.
Puerta de un colegio cualquier que podría ser el nuestro, situación: «Ya hay que hacer el grupo de WhatsApp para la remera1 y campera de egresado del año que viene»; y, sin querer, sigo escuchando y pienso: estos nenes están en la salita de cuatro del nivel inicial y ni saben el significado de la palabra egresado.
La sociedad avanza a un ritmo imparable y algunos padres piensan que, si no tienen la remerita de egresado del jardín –que en Argentina el verdadero egreso se produce en la secundaria porque ahí está el fin de la educación obligatoria–, dicen que sus hijos empiezan a quedar en fuera de juego, fuera del sistema, de pertenecer, con todo el riesgo que ello entraña. Acá nadie vale por lo que es, sino por lo tiene y, si esto es así, estamos en serios problemas.
Pregunto: ¿conocen esos papás cuáles son los intereses y motivaciones a la hora de elegir la formación y educación de sus hijos? Yo pasé el supuesto egreso del jardín maternal cuando algunos me dijeron «qué va a pensar Clío, que ya no va a estar más en el maternal (y se hacía una fiesta de egresado con remera y todo)». Simple, contestaba, Clío va al maternal porque no tenía otra opción, sus padres trabajan.
Empiezo a contar de nuevo y no está lejos cuando dije que dentro de poco va a existir una remera que diga «egresado uterino 2018».
Voy a ser autodidacta y me voy a educar; primero voy a empezar por la definición de marketing: El marketing analiza la gestión comercial de las empresas con el objetivo de captar, retener y fidelizar a los clientes a través de la satisfacción de sus necesidades.
Pregunto ¿cuál es la empresa educativa en una remera de egresado? Y luego tomo también como análisis la palabra packaging que tiene como objetivo primario el de atraer la atención de los clientes y el de ser la principal ventana de comunicación hacia el consumidor. Conclusión primaria: en educación no hay clientes, si los hay se pierde el valor de humanidad que tiene la educación.
Ahora, si queremos un verdadero marketing educativo pensemos en la estrategias que realmente queremos para que nuestros hijos obtengan una mejor educación y elaboremos estrategias de marketing que estas deben orientarse a la persona, a sus aspiraciones para que estas le sean útiles en un futuro.
¿Qué de útil tiene una remera que muchos
no pueden pagar?
Porque, con esto, viene la campera, la fiesta, los regalitos y los chicos que son más sabios que los papás ven que, en su egreso, algunos solo cambian de patio, de puerta. ¿Y las obligaciones en la escuela primaria?
Ah… para eso están «seños», los directivos, el sistema escolar que hace que sea una verdadera «guardería» en dondese «guardan» niños que los padres no pueden «domesticar»; porque lleva mucha inversión de tiempo… Uno, si es un buen padre, nunca, desde el día en que se entera que va a ser padre, podrá dormir tranquilo.
Esto también se llama cariño y queremos todos –ya– que dentro de un plazo muy corto sean totalmente independientes. Los nenes ven y oyen que sus padres se pelean con otros padres, todo es cáscara.
No es ningún secreto que, en el sistema educativo actual, hay muchos padres inmaduros… ¿Dónde «termina» todo este descontrol?, ¿dónde? Pues, en la mejor caja de resonancia de la sociedad, en LA ESCUELA.
Todo este desgaste es tierra estéril, que sin duda no conduce a la calidad educativa de sus hijos, de nuestros hijos (que, además, no está reconocido por nadie). ¿Qué argumentos pedagógico-cognitivos se aducen para este desgaste? Pensemos: los sistemas educativos tienen que machacar hacia democratizar el éxito educativo «y, si no tengo la remerita, ¿seré un condenado social?».
Si, como mamá que estoy educando, y que también soy docente, me preocupo por el futuro escolar de mis hijos, para eso he de buscar las herramientas y estrategias que hagan que todos tengamos una mejor educación: que los docentes estemos preparados, que las autoridades busquen mejores espacios para poder acceder todos a una mejor educación, que los padres nos ayuden a poner límites y seamos más responsables: en la vida, los derechos vienen con las responsabilidades.
Promocionemos mejor nuestra educación, hagamos una escuela para todos, no para mostrar realmente lo que no somos. La educación es un deber y un derecho.
Yo voto por un recuerdo común para evaluar,
así aprendemos a mejorar
1 Remera. nombre femenino [RÍO DE LA PLATA] Prenda de ropa interior o deportiva, ligera, de punto, de hechura recta, sin cuello y con escote de distinto tipo, de manga larga, corta o sin mangas, que cubre el cuerpo hasta la cadera o medio muslo. Sinónimos: camiseta, franela, playera, polera.