CUARTO ENTORNO

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Avanzan los #juevesdepuzzle y crece la conversación en las redes, y en concreto en twitter. Por eso queremos que este cuarto jueves se convierta también en ágora abierta e inteligencia colectiva. Las huellas de Matriosca nos han traído hasta aquí, son ya #huellascomunes by  ‏@drotorrent 

Cuando internet irrumpió en nuestra vida, y cuando las redes sociales comenzaron a modificar nuestros hábitos, rutinas, trabajo y relaciones, la educación en general y la escuela en particular se rasgaba las vestiduras en un debate esquizofrénico entre lo real/presencial y lo virtual. En un análisis etéreo y diferenciado entre una realidad y otra, como si fueran dos vidas diferentes, dos órbitas distintas. Es decir, una versión en pleno siglo XXI del “apocalípticos e integrados” que nos dejara U. Eco.

Animación de 

La tozuda realidad: horas y horas también virtuales, espacios y espacios transfonterizos nos conducen a un entorno diferente, que por ahora estamos denominando cuarto entorno.  Ecosistema híbrido y simbiótico. Es decir, espacio convergente.

Como hemos comentado en educomunicación, parodia y diseño, observa que los elementos que intervienen en el proceso de comunicación son los mismos (emisor, receptor, canal, mensaje), pero las relaciones que ellos establecen son las que han  cambiado. Además, el entorno digital, produce un fusión del online y offline, una zona de simbiosis y sinergias, que requiere un análisis y una praxis holística. En esta línea Elisa Hergueta expone algunas de sus experiencias y reflexiones, que formula de este modo:

Un entorno que ha propiciado un emirec/prosumer en plataformas multicanales, multiformatos, multigéneros y subgéneros en un mensaje intertextual que expande multiples significados y recreaciones. Un cuarto entorno que se aprecia en las últimas obras de Castells, y en concreto en Redes de indignación y esperanza donde se comprueba que el movimiento y la viralidad de las redes sociales, son organización y dinamismo en el tejido físico, social y  asociativo. Que lo que se multiplicaba por las redes sociales, existía antes o a la vez en las calles y plazas.

Es preciso reinventar la educomunicación, y revisar las diferentes fronteras, y también murallas, como describe Baricco en sus bárbaros, que se han levantado en la comunicación y la educación. Proponemos la parodia y el diseño como factores que movilicen el horizonte neurosocial,   que necesitamos para encontrar el entorno, y el oxígeno que nos permita otear esa utopía que convierte la educación y la comunicación en un ecosistema, en un nuevo humanismo 3.0.

Pero lo holístico hay que palparlo, de otro modo nos tropezamos con una utopía vacía…

Un cuarto entorno más allá de lo natural y físico, lo cultural y tecnológico que invita a inventar (lo que no significa ruptura con lo anterior) otra educación.

La experiencia disruptiva  de varios colegios en Cataluña que funcionan sin pupitres, ni deberes, ni clases magistrales; sin asignaturas, ni exámenes, interpela. Es pronto para valorar, pues apenas tienen cinco meses de rodaje. Sin embargo destacamos que todo nació con una lluvia de más 50.000 ideas, en la que participaron más de 1000 alumnos y profesores, además de familias y otros agentes sociales.

Esta iniciativa significa transformar las estructuras organizativas (espacios y tiempos), las relaciones docente-estudiante, estudiante-estudiante, docente-estudiante-procesos, estudiante-docente-comunidad educativa. Modelo pedagógico, trabajo por proyectos, protagonismo del equipo… son algunas claves.

Es decir, un diseño diferente para una escuela diferente.  El impacto de la parodia en la educación despierta interés por su propósito de avalar el diseño (parodia como imitación), mientras que cuestiona su metodología (parodia como crítica). En cuanto a la educación, nadie discute que es necesario, que tenemos la obligación y la responsabilidad de potenciar el  conocimiento a la próxima generación. Pero el latido paródico invita a preguntarnos:

¿Y si no tenemos la obligación de impartir conocimiento? ¿Impartir conocimiento debe ser el objetivo principal? ¿O tiene más importancia  generarlo? ¿La estructura rígida de las aulas, los horarios y los currículos son beneficiosos? ¿Qué habilidades serán las más importantes para los trabajadores del año 2020, 2030? ¿Si cambian nuestros cerebros, por qué no cambia el modelo ?

La parodia tiene el poder de extender el debate, de conseguir que los padres empecemos a cuestionar los colegios, a hablar con nuestros hijos sobre su educación y de presionar a las autoridades y responsables de pensar más allá que el currículo establecido. La parodia tiene el poder de hacernos reflexionar a todos sobre cómo hemos llegado a la situación actual, de un sistema educativo que no prioriza las necesidades de la futura generación de trabajadores y creativos. La parodia también tiene el poder de conseguir que apreciemos aún más el arte y la importancia del concepto.

La construcción de lo que venimos denominando cuarto entorno, que otros han llamado tercer entorno y que en nuestro discurso TRIC significa absorber las lecciones  del cerebro y de la sociedad-red para entender que cada reflexión y cada acción son partes de un todo, en un circuito conectado y abierto, en un mapa dinámico y en construcción.


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